La increíble historia de los tres prototipos de Citroën 2CV que escondieron de los nazis y tardaron 55 años en encontrar
Citroën interpretó, acaso como ninguna otra empresa automotriz, el espíritu de los franceses. No en vano, entre 1925 y 1934, la Torre Eiffel sirvió de espectacular publicidad luminosa de la empresa creada en 1919 en los suburbios de París. Como sus competidoras sufrió las ráfagas del siglo XX: la guerra, la época de bonanza, el nazismo, la apertura a la clase media y la crisis del petróleo. Pero, como ninguna, mostró templanza y arrojo para enfrentar a las fuerzas de Adolf Hitler, como sucedió c...